En 2009, Alberto Crisci abrió el primero de los restaurantes The Clink, como parte de The Clink Charity, un programa de rehabilitación de prisioneros en Reino Unido que actualmente se extiende en 4 cárceles: HMP Brixton, HMP Cardiff, HMP High Down y HMP Styal. Allí, los presidiarios se ocupan de la cocina y el servicio, como parte de un entrenamiento integral que busca darles herramientas a los reclusos para conseguir empleo al salir. Al graduarse reciben una certificación oficial en elaboración de alimentos, servicio y limpieza, así como acompañamiento en el proceso de búsqueda de empleo una vez cumplidas las condenas. Hasta ahora, han alcanzado 80% de inserción laboral y reducido la reincidencia 25%. La iniciativa también incluye The Clink Gardens en HMP Sent, una prisión para mujeres, en la que se entrenan y certifican a las reclusas en horticultura.
www.theclinkcharity.org