Migrar supone siempre un complejo proceso de integración, sobre todo si la condición del extranjero es la de refugiado. Por eso Ana transformó su propia experiencia como inmigrante en proyectos como ORIGENS y luego Ethnic Cook, para integrar social y culturalmente a personas a través de la gastronomía, haciendo que la comida se convierta en hogar para quienes buscan oportunidades en lugares donde, como moneda de cambio, lo los migrantes tienen valiosas tradiciones culinarias que compartir. Ana forma y da empleo, además de generar contextos donde se conozcan las culturas y tradiciones culinarias de quienes vienen de fuera.